Me enferma que la gente me pregunte por qué te quiero así, o que me digan: ya está, olvidate, no vale la pena.
¿Acaso nunca quisieron a alguien a niveles extremos? Y lo peor es que juran que sí, sólo porque "él" les da bola.
No entienden lo horrible que es para mi levantarme todoslos días esperando que pase un milagro, o que esté horas arreglándome los domingos para verte sólo una hora, siempre en el mismo lugar.
No saben de la sensación de que mi cara este reflejada en tus ojos.
No les entra que no puedo dejar de quererte. No estoy esperando que te enamores de mí, o que un día y te levantes y tengas ganas de volver a hablarme. No, es imposible. Sólo quiero estar bien con vos. No quiero tener verguenza de acercarme y decirte: Hola, ¿Cómo estás? Y que me contestés un: Todo bien y ¿vos?. No pido tanto, ni un abrazo, ni una sonrisa, nada. Sólo quiero arrerglar las cosas, para poder vivir tranquila, sin ninguna "asignatura pendiente".